Construcción en República Dominicana ¿Renace el sector o enfrenta un estancamiento estructural?

La construcción en República Dominicana, que fue un motor económico indiscutible en la década pasada, se encuentra hoy ante una encrucijada decisiva: ¿es momento de reactivar su impulso o de redefinir su modelo?

Panorama actual: cifras que hablan solas

• En marzo de 2025, el sector construcción creció un notable 14.5 % interanual, impulsado por una reactivación en obras privadas y aumento en ventas de insumos como cemento y varillas, representando el 35 % del crecimiento económico de ese mes.

  
  

• No obstante, en el acumulado del primer trimestre, el sector aún arrojó un saldo negativo de -1.2 % el contraste plantea una recuperación aún frágil.

  
  

Años dorados vs realidad actual

• Entre 2010 y 2019, la construcción aportó entre 5 % y 17.9 % al crecimiento económico, con picos de dinamismo como el 23.4 % en 2021.

  
  

• Hoy, el panorama ha cambiado radicalmente: el crecimiento del sector se desaceleró a apenas 0.6 % en 2022, 0.9 % en 2023 y 2.1 % en 2024.

  
  

Obstáculos estructurales que frenan el avance

• El alza en precios de materiales es agobiante: cemento y acero se han encarecido hasta 50 % y 68 %, respectivamente, representando cerca del 40 % del costo total de construcción.

  
  

• El costo directo de construir viviendas se incrementó en 4 % solo en junio de 2024, mientras que el Índice de Costos Directos de la Construcción acumuló un alza de 6.5 %.

  
  

• Además, el 61.5 % de las viviendas en construcción permanece paralizado, solo el 14.8 % ha sido completado y 20.2 % se encuentra en ejecución.

  
  

• El financiamiento para MIPYMES continúa siendo oneroso, con tasas de hasta 13.4 %, lo que limita su participación activa.

  
  

Voces desde el sector: urgencia de soluciones

• Aprocovici ha advertido el estancamiento alarmante de la construcción en su aporte al PIB, instando a reactivar el sector como motor de desarrollo económico y social.

  
  

• También se alerta que, pese a la resiliencia económica general del país, el desempeño constructivo está rezagado, afectado por inversión pública insuficiente y falta de capitales frescos.

  
  

Hacia adelante: acciones urgentes para revitalizar el sector

• Incentivos fiscales estratégicos para reducir costos de materiales y motivar la inversión, especialmente para MIPYMES.

  
  

• Modernización tecnológica y procesos constructivos innovadores, para combatir los retrasos y mejorar eficiencia.

  
  

• Ampliación del financiamiento accesible, con tasas competitivas y plazos adecuados para proyectos sostenibles.

  
  

• Impulso público–privado coordinado, donde el Estado retome el rol de promotor de obra pública y estímulo al sector privado.